
Me gusta leer la columna de Barbara Jacobs publicada por La Jornada cada domingo, confieso además que tengo pendiente leer algunas de sus obras literarias que según dicen son excepcionales; la razón por las que les comento esto, es por que realmente me encantó la respuesta epistolar que en ésta entrega Jacobs mantiene con una critica lectora, más que la simple comunicación entre ambas me interesó el tema que las ocupa, se las comparto por si les interesan los puntos de vista presentados en la columna titulada "Feminista con faltas de histeriografía".